lunes, 14 de noviembre de 2011

Cosas que me molestan

Hoy he visto ésta noticia:

Lo que me molesta es que ésta gente dice que realmente en España no hay libertad de religión y que no respetamos sus costumbres.

Después de 2 años aquí, leo estas cosas y no es que me molesten, es que me enfado y mucho.
Me enfado porque ésta gente, antes de decir que no los respetamos, deberían conocer el significado del respeto. Ésta bonita palabra que, puesta en práctica, ahorraría muchos problemas entre todos.

Ésta gente le está dando realmente muy mal uso porque la están usando cuando pretenden hacer lo que a ellos les da la realísima gana y no se les permite porque, allá donde están intentando IMPONER SUS COSTUMBRES, ya existían otras costumbres, normas y leyes establecidas en el país al que han decidido ir a vivir.

Están intentando que parezca que no los respetamos cuando no consiguen que sus niñas y mujeres lleven la cara tapada allá por donde les plazca, cuando en España está prohibido ir con la cara tapada (y no me estoy metiendo con el velo, que sinceramente, me da un tanto igual). 
Lo siguen intentando cuando denuncian a profesores porque, al dar alguna explicación práctica, hablan del jamón o del cerdo (vamos a ver, tienen prohibido comerlo,¡¡¡¡ no escuchar su nombre!!!!) y así, un sin fin de cosas más.

Que se vengan a vivir aquí. Seguro que no tienen el más mínimo problema de convivencia con nadie por todas éstas fantásticas razones:

- Sus mujeres y niñas DEBERÁN ir vestidas con una bata negra llamada abaya (sean musulmanas o no lo sean). Cuantos menos cm2 de piel se vean, mejor. Deberían dar algún tipo de premio a algunas que consiguen ir con 50ºC sin que se vea nada de nada.

- No escuchas música por ahí. Si vas a un centro comercial o a cualquier restaurante no hay música (cosa que se agradece cuando pasas por delante de las tiendas Stradivarius que hay aquí). Aunque realmente sí que se escucha música por aquí. 5 Veces al día, todos los días del año. Sale de las mezquitas (más o menos 1 mezquita por manzana). Dependiendo de dónde vivas o estés, puedes escuchar los rezos cantados en estéreo. El otro tipo de música que se puede escuchar es el habibi, habibi típico de aquí, a todas horas en bastantes coches.

- Sólo hay mezquitas. Está terminantemente prohibido practicar cualquier otra religión.

- Que te pilla ramadám? No hay problema, no va a haber ningún capullín que no sea musulmán dándote envidia delante de tus narices mientras se toma un vasito de agua o se fuma un cigarro delante de tí. 
No hay problema porque, seas musulmán o no, mejor no se te ocurra que te vean bebiendo, comiendo o fumando de día por la calle, porque puedes tener un buen problema.

- Miedo a que te cuelen carne de cerdo en el menú del día? No problemo. Aquí no permiten que los perros infieles que vienen a trabajar y a vivir se traigan ese animal impuro ni para consumo propio.

- Estás harto de que los plastas de otras religiones te intenten convencer de que su religión es mejor que la tuya? Éste es el mejor lugar!!! Tú puedes bombardear todo lo que quieras a todo no musulmán para que se convierta (que ya tenemos 3 coranes en español fruto de regalitos que le hacen a mi marido), pero como a esos pringados se les ocurra hablarte de su religión, les puedes denunciar por proselitismo. 
Y lo mejor de todo es que si tienes cualquier problema con algún extranjero aquí y quieres quitarte el marrón de encima porque le has hecho alguna pifia al guiri en cuestión que, encima quiere llamar a la policía. Sin ningún tipo de problemaaaaaaa... le dices al infiel que sí, que llame a la policía, que ya les dirás tú en tu idioma que el extranjero de turno te ha dicho que se caga en tu dios y en todos sus muertos. Verás lo bien que el extranjero se irá sin decir ni mú y te librarás él a velocidades supersónicas.

- Quieres tener muchos descansos durante el día? Perfecto. Se para el país literalmente 5 veces al día. Se cierran todos los comercios durante una media hora. No trabaja ni el tato. Bueno, excepto los pringados de los no musulmanes que no paran en sus oficinas.

Seguro que podría seguir, pero para qué....

La diferencia entre los que están allí, en un país que no es el suyo y los que estamos aquí, en un país que tampoco es el nuestro, es que, aunque no nos guste el sitio donde estamos viviendo, nosotros no nos estamos dedicando a denunciar a todo el que podamos en el país porque han hecho algo que nos ha molestado o que no es acorde con nuestras costumbres.

Es decir, sabemos que estamos en un país con unas costumbres muy distintas y que nos tenemos que amoldar lo mejor posible a las leyes, normas y costumbres que imperan en él.

A ver si toda esa gentuza que no deja de tocar las pelotas con el respeto cuando allí tienen sus propias carnicerías, mezquitas e inmensas facilidades y ventajas para que puedan practicar su religión y sus costumbres, entiende de una vez lo que es el respeto y lo practican hacia la gente del país al que se han ido a vivir.




4 comentarios:

Gonzalo GY dijo...

Muy buena recopilación. Pero algo me dice que no surtirá demasiado efecto en eso que tan bien describes como "gentuza que toca las pelotas".

Saludos.

Cuca dijo...

Me temo que tienes toda la razón. En esa gentuza nada de nada, pero a ver si nos concienciamos los que los tenemos que sufrir.
Que una cosa es que se les respete, que no tengo ningún problema en hacerlo, y otra muy distinta es que se nos suban a las barbas y no nos dejen vivir con nuestras costumbres por hacer lo que a ellos les viene en gana si siguen consiguiendo que en ésta sociedad que está rozando la gilipollez absoluta nos sintamos culpables por cosas que no tienen razón de ser.
Eso es lo que me molesta. Que si no les gusta cómo es nuestro país y no son capaces de convivir con lo que tenemos, que se larguen a su país.
Que es lo que pienso hacer yo en cuanto pueda.

Chus Nevado dijo...

Como siempre, la ley del embudo. Pero es que eso es lo que pasa cuando alguien se cree superios. Tristísimo. Ánimo, niña, que tarde o temprano regresarás al hogar y dejarás de lado tanta injusticia.
Te echo de menos.

Besos

Cuca dijo...

Si el problema no es lo que tenemos que hacer o más bien, lo que no podemos hacer. Yo ya sabía a dónde venía y lo que me iba a suponer vivir aquí a grandes rasgos. Lo sabía y estaba asumido. Me puede gustar más o menos, pero decidí venir.
Lo que no soporto es tener que soportar que los que se van allí traten de hacernos sentir culpables porque no se hace todo lo que a ellos les venga en gana y el hecho de que cualquier españolito de a pie llegue a tener miedo por mencionar la raza porcina, tener que cambiar asignaturas que se han dado toda la vida o cualquier otra costumbre nuestra porque venga a nuestro país gente sin ningún tipo de educación que no conoce lo que es el respeto a otras culturas.
Y cuando vuelva al hogar, va a ser donde vea todas éstas cosas (ojalá me equivoque) y si eso ocurre, será allí donde realmente me moleste más que otra cosa.
Lo de aquí es supervivencia en una cultura que no es la mía y acataré lo que tenga que acatar.

Un besote, yo también te echo de menos